El final de los romanov: asesinato de los últimos zares de rusia

Los zares se casaron en 1894 y tuvieron cuatro hijas seguidas: Olga, Tatiana, María y Anastasia. Alexei, su anhelado hijo y heredero, fue su último descendiente, nacido en 1904. Según todas las fuentes, los Romanov eran una familia unida y feliz. Los cinco hijos del zar Nicolás II de Rusia  en una fotografía de 1910, ocho años antes de que la guerra y la revolución los arrastrasen a todos a una muerte violenta

La enfermedad del heredero

La zarina Alejandra heredó la hemofilia de su abuela, la reina Victoria del Reino Unido y se la transmitió a su hijo Alexei. Esta enfermedad afecta a la coagulación de la sangre, de manera que cualquier lesión menor puede causar serios problemas. En el caso de Alexei, un pequeño golpe podía desencadenar una intensa hemorragia interna y hacer que sus venas corrieran el riesgo de romperse. Sus articulaciones eran muy vulnerables; si se le inflamaban, el tejido dañado le presionaba los nervios, causándole un intenso dolor

El zar y su familia fueron asesinados a tiros,  apaleados​ por tropas bolcheviques. Sus cuerpos fueron llevados luego al bosque Koptyaki, donde fueron desnudados y mutilados.​ Inicialmente arrojados por un pozo de extracción , los cuerpos fueron posteriormente desechados en dos tumbas sin marcar en un campo . Una investigación del ejército blanco no pudo encontrar la tumba, concluyendo que los restos de la familia imperial habían sido incinerados en la mina, ya que se encontraron indicios de fuego.​